Microplásticos: Qué son, Dónde Se Encuentran y Cómo Eliminarlos
Los microplásticos se han convertido en una preocupación ambiental global debido a su ubicuidad y persistencia en nuestro entorno. Estos contaminantes invisibles a nuestros ojos están presentes en el aire, el agua y en muchos productos de uso cotidiano, afectando tanto al medioambiente como a nuestra salud. Pero ¿Qué podemos hacer para revertir la situación? A lo largo del siguiente artículo no solo te explicaremos que son los microplásticos, sino que además te diremos todo lo que puedes hacer para disminuir con el tiempo su presencia.
¿Qué son los microplásticos?
Los microplásticos son pequeñas piezas de plástico, de menos de 5 milímetros de diámetro, que contaminan el medio ambiente, entre otras cosas. Se originan a partir de la fragmentación de objetos plásticos más grandes, como bolsas, botellas, empaques y otros desechos, o se producen intencionalmente para su uso en diversos productos.
Son un problema cada vez mayor, ya que su tamaño diminuto les permite ingresar a ecosistemas donde antes era imposible, como el interior de los organismos vivos. Esto está generando gran preocupación por sus potenciales impactos ambientales y en la salud tanto de nosotros como de los animales.
¿Qué tipos de microplásticos existen?
Actualmente, existen dos clasificaciones principales para los microplásticos, las cuales son:
Microplásticos primarios
Producidos intencionalmente para su uso en diversos productos, como exfoliantes cosméticos, pastas de dientes, ropa sintética y neumáticos. Suelen ser más grandes que los microplásticos secundarios (hasta 1 mm).
Microplásticos secundarios
Se derivan de la fragmentación de objetos plásticos más grandes, como bolsas, botellas, empaques y otros desechos. Pueden ser aún más pequeños que los microplásticos primarios (menos de 1 mm, incluso hasta el tamaño de nanopartículas).
¿Cómo afectan los microplásticos al medioambiente?
Los microplásticos pueden derivar de fuentes primarias, como microperlas utilizadas en productos de cuidado personal, o de fuentes secundarias, como la degradación de objetos plásticos más grandes, pero ninguno es peor o más dañino que el otro. El problema con ellos es que los hay en demasiada cantidad, en todos lados y en el día a día de miles de millones de personas y animales. Es esta acumulación o este volumen, lo que ya ha generado problemas y lo que por ende, seguirá generando de forma exponencial. Pero ¿Cómo afectan exactamente los microplásticos al medioambiente? Te lo explicamos:
Impacto en ecosistemas acuáticos
Una gran cantidad de microplásticos termina en océanos y cuerpos de agua dulce. Debido a su tamaño diminuto, estos fragmentos son ingeridos por una amplia variedad de organismos acuáticos, la ingesta de microplásticos puede obstruir los tractos digestivos, reducir la capacidad de alimentación y provocar una falsa sensación de saciedad, lo que afecta la salud y supervivencia de dichos animales. Además, los microplásticos pueden actuar como vectores de contaminantes químicos, transportando toxinas y metales pesados que se adhieren a sus superficies, agravando aún más el impacto negativo en la vida marina.
Transmisión en la cadena alimentaria
Los efectos de los microplásticos no se limitan a los organismos acuáticos. Al ser consumidos por peces y otros animales marinos que son parte de la dieta humana, también logran entrar en nuestra cadena alimentaria. Esto plantea preocupaciones sobre la bioacumulación de plásticos y sus aditivos tóxicos, con posibles consecuencias para la salud, incluyendo daños al sistema endocrino y efectos carcinogénicos. Pero no solo llegan a nuestra alimentación de esta forma, el uso de plásticos en la producción de alimentos, en los envasados y demás, también hace que se acumulen partículas diminutas que se acumulan con el tiempo.
Efectos en el suelo y la agricultura
Los microplásticos también se encuentran en suelos agrícolas debido a la aplicación de lodos de depuradora, fertilizantes contaminados y la descomposición de productos plásticos agrícolas. Estos plásticos alteran las propiedades físicas del suelo, alterando como consecuencia su capacidad de retención de agua y nutrientes, y potencialmente inhibiendo el crecimiento de las plantas. Además, los organismos del suelo, como lombrices y otros invertebrados, que conviven de forma simbiótica con el suelo, también se ven alterados.
Impacto en la calidad del aire
Estudios recientes han demostrado que los microplásticos también están presentes en la atmósfera. Las partículas plásticas son transportadas por el viento y precipitadas en áreas remotas, como montañas y regiones polares, afectando la calidad del aire y contribuyendo a la contaminación ambiental en lugares previamente considerados prístinos.
¿Dónde se encuentran los microplásticos en el hogar?
Por si ya no te había quedado claro, los microplásticos están presentes en una amplia variedad de productos y lugares dentro y fuera del hogar, a menudo sin que nosotros como residentes seamos conscientes de su existencia. Algunas de las principales fuentes de microplásticos en el hogar incluyen:
Prendas de vestir
Las fibras sintéticas, como el poliéster, el nylon y el acrílico, utilizadas en la fabricación de ropa sostenible para mujer, son una fuente muy significativa de microplásticos. Durante el lavado, estas fibras logran desprenderse y entrar en el sistema de aguas residuales. Las plantas de tratamiento de aguas residuales no suelen se capaces de filtrar eficazmente estas fibras, lo que resulta en su liberación al medio ambiente acuático.
Productos de cuidado personal
Muchos productos de cuidado personal, como exfoliantes faciales, las pastas de dientes y los geles de ducha, contienen microperlas de plástico que se utilizan por sus propiedades abrasivas. Estas microperlas son demasiado pequeñas para ser atrapadas por los sistemas de filtración de aguas residuales y terminan en cuerpos de agua, contribuyendo así a la contaminación por microplásticos.
Artículos de limpieza
Los productos de limpieza, como detergentes en polvo y productos para fregar, también contienen microplásticos que se utilizan como agentes abrasivos o rellenadores. Estos productos liberan partículas plásticas durante su uso y desecho, añadiendo por ende más microplásticos al medio ambiente.
Envases y embalajes
Los envases de plástico y los materiales de embalaje, como bolsas de plástico, envases de alimentos y botellas, se descomponen en partículas más pequeñas con el tiempo o si los cortamos. Aunque no seamos capaces de verlo, estas acciones liberan partículas de plástico.
Utensilios, equipos y muebles
Utensilios de cocina y equipos hechos de plástico, como tablas de cortar, espátulas y batidoras, liberan microplásticos debido al desgaste y la abrasión durante el uso diario. Los muebles tapizados y la decoración del hogar que contienen materiales sintéticos también pueden desprender fibras y partículas de microplásticos.
Consejos para reducir la contaminación por microplásticos
Reducir la contaminación por microplásticos es una tarea que requiere esfuerzos tanto individuales como colectivos y mucha educación al respecto. Como consumidores debemos comenzar a tomar decisiones más conscientes y entender que para adquirir algún producto, se deben dar una serie de procesos que muchas veces no son los más amigables con nuestro planeta y nuestro medio ambiente. Es esta consciencia o esta responsabilidad de compra y consumo lo que irá marcando la diferencia, por lo que te dejamos aquí algunos tips para reducir la contaminación de lo que puedes comenzar a hacer en tu vida diaria:
Opta por ropa de marcas con consciencia ambiental
Al comprar ropa deportiva sostenible, elige prendas hechas de fibras naturales como algodón, lana, lino o bambú que se hayan producido de forma ética. También puedes optar por prendas como conjuntos deportivos para mujer de hechas con plástico reciclado como las de Fitplanet, que además de reducir el consumo de este material, estarás ayudando a cuidar los ecosistemas marítimos.
Usa bolsas para lavar anti-microplásticos
Existen accesorios sostenibles para llevar como las bolsas de lavado anti-microplásticos, que capturan las microfibras sintéticas desprendidas durante el lavado, evitando que las microfibras lleguen al sistema de drenaje y, eventualmente, a los océanos.
Menos lavados y a menor temperatura
Reduce la frecuencia de lavado de tus prendas y utiliza programas de lavado a baja temperatura. El desgaste de las fibras es menor en lavados menos intensos, disminuyendo la cantidad de microplásticos liberados.
Usa filtros especiales
Instala filtros de microplásticos en tu lavadora. Estos dispositivos están diseñados para atrapar las microfibras sintéticas que se desprenden durante el lavado, evitando que entren en el sistema de aguas residuales.
Elige siempre productos de cuidado personal que no tenga microplásticos
Verifica las etiquetas de los productos de cuidado personal y opta por aquellos que no contengan microperlas o ingredientes plásticos. Muchas marcas ahora ofrecen alternativas ecológicas que son igualmente efectivas.
Reduce el consumo de plásticos de un solo uso
Minimiza el uso de productos plásticos desechables como bolsas, botellas, pajillas y envases, en su lugar opta por alternativas reutilizables hechas de materiales sostenibles como vidrio, metal o bambú.
Utiliza productos de limpieza que sean ecológicos
Selecciona productos de limpieza ecológicos que no contengan microplásticos de la misma manera de los productos de cuidado personal. Hay una variedad de detergentes y productos de limpieza en el mercado que son seguros para el medio ambiente.
Infórmate y haz del reciclaje parte de tu día a día
Asegúrate de reciclar correctamente los productos plásticos y sigue las pautas locales de reciclaje. El reciclaje adecuado reduce la cantidad de plásticos que terminan descomponiéndose en microplásticos en el medio ambiente.
Evita los textiles de microfibra en los productos textiles del hogar
Al igual que con la ropa de baño, reduce el uso de productos textiles de microfibra, como paños de limpieza y toallas. Opta por alternativas de algodón u otros materiales naturales que no liberen microplásticos.
Apoya las campañas y políticas que busquen un impacto positivo medioambiental
Participa en campañas y apoya políticas que buscan reducir la producción y el uso de plásticos. La presión pública siempre lleva a cambios significativos a nivel industrial y gubernamental.
Conclusión
En resumen, abordar la contaminación por microplásticos es vital si queremos proteger nuestro planeta y nuestra salud. Aunque la presencia de estas partículas es omnipresente, adoptar prácticas sostenibles y hacer elecciones informadas marcará una gran diferencia. Desde optar por productos de cuidado personal sin microperlas hasta utilizar bolsas de lavado especiales, todos podemos contribuir a reducir la carga de microplásticos en el medioambiente, juntos.
